Prof. Carlos Molina Camacho - UCV
(Ex Superintendente Nacional de Cooperativas)
Tal vez lo más difícil en el mundo de las cooperativas son las
relaciones humanas que deben establecerse en esas empresas, esencialmente
participativas y de autogestión.
Puede una cooperativa poseer unos magníficos estatutos, tener un
capital, clientes a quienes vender su producción de bienes o sus servicios, o
bien agrupar a consumidores o usuarios a fin de que adquieran aquellos bienes o
servicios que precisan, con ahorros substanciales y a óptima calidad, pues
carecen de fines de lucro, a diferencia de los intermediarios o comerciantes.
Pueden incluso tener un estupendo plan de negocios, un buen gerente, y
sin embargo si descuidan ese aspecto de las relaciones interpersonales entre
los asociados, tal descuido puede terminar con los más caros anhelos de los
cooperativistas.
Nuestro Bolivar no sólo fue un extraordinario militar, un genio
´político, un administrador pulcro de los dineros públicos, sino que también
fue un maestro de las relaciones interpersonales. No fue nada fácil poner de
acuerdo a aquellos líderes civiles o
militares para que llevasen a cabo una obra humana gigantesca: el combate y
posterior derrota del imperialismo español.
El practicaba ciertos principios
de relaciones interpersonales que hizo posible ese milagro de mantener
cohesionado a tan abigarrado grupo de dirigentes, no sólo de Venezuela sino
también de otros países hermanos. Si hacemos el esfuerzo en nuestras
cooperativas de poner en práctica esos
principios, podemos asegurar el éxito de las mismas en esa delicada área de su
desenvolvimiento.
Mencionaremos en esta entrega algunos de ellos.
1.- “El que manda debe oir aunque
sean las más duras verdades y, después de oidas, debe aprovecharse de ellas
para corregir los males que producen los errores” (Bolivar) Un buen dirigente cooperativista debe ser
sincero y reconocer con humildad.ante sus compañeros los errores cometidos. Ese
buen ejemplo seguramente será imitado por el resto de los miembros de la
organización y eso sin duda la beneficia.
2.- “Los elogios debidos al mérito
alimentan las almas sublimes” (Bolivar).
Reconocer los aciertos y los logros de los compañeros los estimula a dar
cada vez más por su organización.
3.- “Cuando pienses criticar los
defectos de los demás, corrige primero los tuyos. Nadie es perfecto en esta
tierra” (Bolivar).
Las críticas malsanas, pueden dar
al traste con una cooperativa y sus loables objetivos de dar bienestar a sus
socios. Si es menester criticar a algún compañero debe hacerse con respeto
hacia su persona, con el fin de que
rectifique el error y nunca para humillarlo
“La ingratitud es el crimen más grande que pueden los hombres llegar a cometer” (Bolivar). Es un principio básico en las relaciones interpersonales dentro de las cooperativas agradecer ante los demás el bien que se reciba de la organización –sus beneficios económicos, sociales y morales- asi como el que se obtiene de los demás compañeros.